Ahora que estamos todos (o casi todos) en proceso de comer mejor tras las fiestas, seguro que muchos estamos luchando contra los antojos. Dime, ¿no te apetece una buena pizza?
Pues pon atención a la receta que te voy a enseñar hoy. Básicamente consiste en sustituir la base de la pizza por berenjena asada (aunque también lo podéis hacer con calabacín o, incluso, con calabaza) para hacer una pizza mucho más ligera. Además es una receta que no solo se ve bonita y apetitosa: está riquísima.
INGREDIENTES (para cuatro personas):
- 2 berenjenas
- Salsa de tomate
- Mozzarella
- Tomatitos cherry
- Hojas de albahaca frescas
- Orégano
PREPARACIÓN:
- Cortamos la berenjena haciendo láminas de aproximadamente un centímetro de grosor. La primera y la última lámina no nos sirven para esta receta porque tienen demasiada piel.
- Salamos las berenjenas y las pasamos por la plancha cinco minutos.
- Ponemos papel de horno en una bandeja y colocamos las berenjenas.
- En cada lámina untamos un poco de salsa de tomate y añadimos la mozarella y los tomatitos cherry. Por último, espolvoreamos orégano.
- Los metemos en el horno a 250ºC durante entre 8 y 10 minutos.
- Los sacamos del horno y añadimos unas hojas de albahaca frescas que le darán mucho aroma y color a la receta.
Qué pintaza, ¿eh? ¡Probadlas y me decís!